20/20 es la medida de vista perfecta según los oculistas y 20/20 es la visión ante la vida que Dios quiere darnos; solo tenemos que seguir sus pautas para alcanzar esa visión perfecta que nos ayudará a desarrollar una vida con plenitud.
Nos hemos acostumbrado a ver lo mano desde que amanece el día: tomamos el desayuno o vamos al trabajo escuchando las noticias y al anochecer, nos acostamos con el noticiero de las 10. No es necesario redundar en la clase de noticias que oímos, cierto? Y esto es lo que hacemos todos los días por años!!!
Dios nos equipó con la capacidad de encontrar aquello que buscamos y si andamos buscando los defectos de los demás y de las cosas, solo defectos y cosas feas veremos. Igualmente, si buscamos lo mejor del mundo y de las personas, encontraremos personas maravillosas. Lo que buscamos, eso veremos y por eso, la importancia de re-educar a nuestros ojos, mejor dicho, hacia dónde direccionamos nuestra mirada. Y ojo, mucho cuidado con lo que buscamos porque si no buscamos lo bueno, incluso hasta lo bueno que tenemos en nuestro delante será imposible de reconocer.
Empezando por el principio: (Sal.109:17) lo primero que debemos hacer es cambiar la manera en que conceptuamos o definimos los hechos, problemas y circunstancias porque exactamente de esa misma manera responderemos a los problemas y acontecimientos.
Gozo aun en la tormenta: (Stgo. 1: 2-4) Santiago nos insta a que sepamos gozarnos aun en los momentos de prueba. Pero, ¿cómo logramos ésto que parece tan difícil? Créeme que lo logramos sabiendo que el final de aquella circunstancia adversa será la victoria que obtendremos en Jesucristo porque a los hijos de Dios, todas las cosas les ayudan para bien (Rom. 8:28). Igualmente, sabiendo que saldremos con una fe fortalecida de la prueba.
Definiendo las circunstancias como Dios lo hace: analicemos a David: él tuvo que enfrentar grandes desafíos en su vida como hombre, soldado y rey. Fue de menos a más a lo largo de su vida y sabía salir bien parado en medio de sus adversidades. En aquella memorable batalla contra Goliat, con seguridad, David veía al ejército israelí atemorizado y sin embargo, David lo definió como el ejército de Dios. Es que David decidió ver las circunstancias desde la perspectiva de Dios, por eso tuvo el enfoque perfecto y por tal razón, David recibió fuerza y valor de parte del Señor; esa fortaleza viene como resultado de una actitud correcta.
Seamos agradecidos: (1 Tes. 5:18) la gratitud es una actitud que debemos cultivar en todo momento. Antes de recibir cualquier favor, aprendamos a ser agradecidos a Dios por lo que ya hizo por nosotros por más difícil que puedan ser nuestras circunstancias actuales.
La simpleza de vida: en este mundo tan vertiginoso, ya no hay tiempo para disfrutar de las cosas simples de la vida. ¡¡CRASO ERROR!! Los problemas y adversidades siempre estarán allí; por tanto, estemos listos y no nos dejemos sorprender por ellos. Así que relajémonos y no nos perdamos el amanecer o atardecer, jugar con nuestros niños y gozar de su risa o de una caminata sin rumbo, escuchar tus melodías favoritas, contemplar las flores (no las artifiales!), toma tiempo para reír, para aquello que te guste pero hagamos un alto y digámosle basta al trajín. Créeme, escucharemos mejor a Dios y disfrutaremos de su presencia.
Estas actitudes no se desarrollan automáticamente sino que debemos cultivarlas y fortalecerlas; y, al igual que los programas para computadoras, si instalamos los programas correctos, tendremos resultados correctos. Solo depende de ti y de mí seleccionar esos programas correctos.